1. Preparación:
No olvides dedicar tiempo a repasar, reforzar y afianzar lo que aprendiste.
2. Autoevaluación:
2. Autoevaluación:
Diseña, busca y realiza ejercicios y exámenes muy similares al que se vaya a realizar, ajustando tiempos, revisando las respuestas y aprendiendo de los errores.
3. Convicción:
3. Convicción:
Valora tus conocimientos y la adecuada preparación; confía en ti para realizar la prueba adecuadamente.
4. Nervios:
4. Nervios:
Llega descansado, con tiempo suficiente, con el material necesario; antes de empezar, intenta no repasar, ni hablar del examen y evita a los compañeros nerviosos.
5. Tiempo:
5. Tiempo:
Conoce, distribuye y controla el tiempo disponible para realizar toda la prueba, y para responder a cada pregunta. Lee, planifica, escribe, revisa.
6. Autocontrol:
6. Autocontrol:
Céntrate en pensamientos positivos; si te quedas en blanco la tranquilidad te ayudará a recordar; puedes pasar a la pregunta siguiente y retomarla después, pero es muy importante que no la olvides.
7. Precisión:
7. Precisión:
Sigue las instrucciones, lee atentamente los enunciados y la información que te proporcionan. Conoce el valor de cada pregunta.
8. Respuestas:
8. Respuestas:
Ajústate a lo que piden. Resume, define, esquematiza, compara, desarrolla… si es posible, no dejes preguntas en blanco, responde al menos con alguna idea, un esquema.
9. Presentación:
9. Presentación:
Cuida el contenido, estructura, la forma ,caligrafía, ortografía, y la presentación.
10. Revisión:
10. Revisión:
Relee, revisa y repasa todo el contenido antes de entregarlo. Confirma que has respondido correctamente. Los ejercicios de evaluación son un reto, una oportunidad de aprendizaje. Son una ocasión para demostrar que has adquirido, asimilado e interiorizado una serie de conocimientos que probablemente tendrás que aplicar después en entornos reales.
Ahora si, estás listo para contestar tus exámenes y obtener excelentes resultados.
¡¡¡Mucha suerte!!!
Livi=👍👍👍
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